viernes, 18 de abril de 2008

El cannabis también tiene usos positivos (por Isabel).




Canadá ha aprobado sistemas para que la marihuana sea efectiva en algunos enfermos. Se aprobó porque se consideró que la marihuana podía tener efectos benéficos en el tratamiento de algunas enfermedades. Ello ha saltado a los periódicos. Las autoridades canadienses han autorizado tres categorías de pacientes a quien se puede aplicar:


-pacientes terminales de menos de 12 años de vida
-pacientes terminales que tienen cáncer o sida, esclerosis, artritis severa o epilepsia.
-aquéllos en que los especialistas consideran la marihuana efectiva con fines terapéuticos.

La decisión ha causado sorpresa en el ámbito canadiense incluso ha sido muy criticada.
Aunque parece que no hay una prueba real de los efectos benéficos, los pacientes dicen sentirse aliviados.
Parece que hay algunas sustancias en el cannabis que producen un efecto calmante en las dolencias.

El cannabis en la historia

En la historia los primeros usos se hicieron en China hacia el año 3000 antes de Cristo. Su nombre proviene del termino de quanannu cuyo nombre conocían los asirios. En los siglos III y V antes de Cristo los escitas nómadas lo consumían con el efecto de embriagarse en las estepas de Liberia.
En los siglos II y IV, como indica Galeno se consumía como medicina y también para embriagarse. Los textos sánscritos de la India las llamaban píldoras de la alegría y estaban formadas por azúcar y cannabis.
En el siglo II Arnoldo de Lubeck describió los efectos del hachís provocando el éxtasis
la alegría, la perdida de los sentidos…


Los árabes lo importaron de la India, donde se consumía como parte de su cultura y lo difundieron en la Edad Media. A Europa llegó de la mano de
los Cruzados a su retorno de Tierra Santa. Descartes solía escribir al calor de una estufa al que había añadido un puñado de ciertas especies hierbas traídas del norte de África.

En el siglo XIX fue redescubierto como consecuencia de las conquistas coloniales de África pero no gozaba de mucho consumo, sólo artistas y escritores como Baudelaire, Jean Jacques Feuchere, Heneri Monnier, Delacroixe, Roger de Beavoir ,Valle de Inclán, o Teofilo Gautier parece que consumían.

Uno de ellos escribió sobre el cannabis: “Mi cuerpo se disolvía y se hacia transparente dentro de mi cuerpo lo notaba como una esmeralda chispeante con miles de Chispas de fuego. Mis pestañas se alargaron indefinidamente como despegándose como hilos de oro, desde husos de marfil que giraban muy rápido a toda velocidad.”

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